jueves, 8 de octubre de 2015

JIU JITSU Y MENTE. ¿El JIU JITSU NOS HACE MÁS INTELIGENTES?

NO ES GRATUITO AFIRMAR que, los practicantes de “El Arte Suave” estimulan áreas del cerebro que les permiten desarrollar habilidades del intelecto que, fuera del gimnasio les ayudarán a resolver incluso, problemas de la vida cotidiana. Y quien lo practica lo nota, ya que en el corto tiempo, advertirá con sorpresa que ante una situación específica, su poder de análisis y resolución aumenta considerablemente. Es común que los estudiantes avanzados de esta disciplina, comiencen a solventar con facilidad, situaciones con cierto grado de complejidad en todos los ámbitos de su existencia. Y esto tiene una explicación científica. ¿Qué es lo que pasa cuando aprendemos una técnica de Jiu Jitsu?. Pues bueno, nuestro cerebro comienza a asimilar de manera visual, los movimientos, para después memorizar paso a paso cada uno de éstos. Estas imágenes y secuencias serán traducidos a los movimientos propios del cuerpo, que, estando la mayor parte del tiempo en el suelo, propiciará la estimulación del sentido de la ubicación en el tiempo y el espacio, (en casi la mayoría de los casos, cuando hay giros o volteretas, hay gran desorientación), pero que con la práctica, se logrará mejorar esta capacidad, reduciendo dicha desorientación al mínimo, permitiéndonos de manera rápida y eficaz fijar una posición, estabilizándola (parte importante de este arte marcial), mientras se mantienen el equilibrio. 


Pero no todo termina ahí, lo interesante resulta cuando, teniendo una posición, dependemos de los movimientos que hará el contrincante, lo cual nos obliga a mantener los sentidos alerta, debiendo decidir cuál técnica será la que contrarrestre el ataque o en su caso, nos permita concluir el combate a favor. 

Para esto, tendremos que elegir en fracciones de segundos, dentro de un cúmulo de opciones, variables y combinaciones, cuál es la idónea para lograr el cometido. No en balde algunos llaman a este arte el “AJEDREZ HUMANO”. Pero no todo termina ahí; la mente del “Jiujiteiro”, comenzará a trabajar  a todas horas y en cualquier lugar, pues incluso después del entrenamiento sigue elaborando complejos patrones para resolver aquellos puntos que quedaron sueltos durante la práctica, lo cual mantiene la mente en constante "ejercicio" y reflexión, estimulando ambos hemisferios cerebrales como a continuación se señalará: 

Se estimula el HEMISFERIO IZQUIERDO, al que le corresponde entre otras funciones, la lógica  así como las facultades necesarias para transformar la información en palabras, gestos y pensamientos, controlando como ya se sabe, el lado DERECHO del cuerpo. Dentro de la materia que nos ocupa, corresponde a este hemisferio la atención focalizada, el control del tiempo, la planificación, ejecución y toma de decisiones y la memoria a largo plazo. Ahí se procesa la información usando el análisis, que es el método de resolver un problema descomponiéndolo en piezas y examinando estas una por una. 

Siguiendo con lo anterior, corresponde al HEMISFERIO DERECHO, el control del LADO IZQUIERDO del cuerpo, siendo un hemisferio integrador, centro de las facultades viso-espaciales no verbales, especializado en sensaciones, sentimientos y habilidades especiales; como visuales y sonoras ahí se encuentra la zona de la creatividad, útil para habilidades como las artísticas y musicales; creatividad que es un elemento básico en el Jiu Jitsu. Este lado del cerebro concibe las situaciones y las estrategias del pensamiento de una forma total e integra varios tipos de información (sonidos, imágenes, olores, sensaciones) y los transmite como un todo. El método de elaboración utilizado por el hemisferio derecho se ajusta al tipo de respuesta inmediata que se requiere en los procesos visuales y de ORIENTACIÓN ESPACIAL. Aunque el hemisferio derecho está, sin duda, especializado, en las funciones no verbales, concretamente en las viso-espaciales, es el receptor e identificador de la orientación espacial, el responsable de nuestra percepción del mundo en términos de color, forma y lugar. Utilizando sus facultades somos capaces de SITUARNOS Y ORIENTARNOS; podemos por ejemplo, saber por qué calle estamos caminando mirando simplemente la arquitectura de los edificios que hay a uno y otro lado de ella, esto es la forma y aspecto de las fachadas, de los tejados y de las puertas de entrada. Si vamos caminando por la calle y reconocemos un rostro, la identificación de dicho rostro también corre a cargo de la memoria visual del hemisferio derecho. El nombre que corresponde a la persona que posee dicho rostro conocido lo proporciona, en cambio el hemisferio izquierdo. El hemisferio derecho procesa la información mayoritariamente usando el método de síntesis, componiendo o formando la información a partir de sus elementos, a un conjunto.


Así las cosas, y sin entrar en detalles, la práctica del Jiu Jitsu resulta en una herramienta eficaz, para practicar o desarrollar aquellas áreas del cerebro relacionadas con la lógica, con la resolución de problemas complejos que involucren datos (tanto físicos como sensoriales) cuya secuencia deba ser recordada y que deban de plantearse las soluciones primeramente desde el ámbito del pensamiento, antes que de manera física; estimula la creatividad, así como el desarrollo del sentido de la orientación en el tiempo y el espacio, por lo que sus practicantes destacarán en la vida diaria, al estar capacitados y entrenados de manera indirecta en la resolución de situaciones que de otra manera representarían una encrucijada; ya que así como para salir de una guardia debemos de considerar más de una opción para que sea eficiente, o para aplicar una técnica, debemos decidir entre aplicar alguna que involucre un movimiento del brazo o de la mano, la pierna o alguna otra extremidad, en la vida diaria estas habilidades incidirán de manera importante ante los problemas que se presenten, ya que la mente estará entrenada para elegir de manera rápida y analítica entre distintas opciones de manera creativa, a diferencia de quien no cuente con entrenamiento, que en términos generales optará por las resoluciones ordinarias, con el inconveniente que al encontrar algún obstáculo, el proceso de resolución correrá riesgo de detenerse al no estar acostumbrado a considerar otra alternativa, máxime cuando no exista una estrategia o una planificación como la que se aprende en el tatami. De igual manera, la mente entrenada del "Jiujiteiro", aún cuando ha resuelto alguna situación, no se queda ahí, sino que seguirá buscando una forma que sea mejor, más eficiente o más rápida, lo que mantendrá el cerebro en actividad constante, con los beneficios que esto conlleva.  Por lo tanto, la práctica del Jiu Jitsu se recomienda para todo tipo de personas, especialmente para niños, como una forma de complementar su desarrollo motriz e intelectual, así como para los adolescentes y adultos que encontrarán rápidos y evidentes resultados en cuanto a una mejora en su memoria e inteligencia.   


MAI KHEERN MMA/ TEAM CARVALHO.